La Vinotinto - de Cenicienta a Reina del Baile en solo una Copa

Es agradablemente sorprendente el efecto Vinotinto en las calles de Venezuela Soy fanático del fútbol, en mis años de adolecencia, venezuela no figuraba ni de cerca como potencia futbolística. En casa los mundiales eran eventos impelables, veíamos tantos partidos como era posible, y nuestro favorito, por el que moríamos y sufríamos, Brasil. En ese entonces, los partidos de Pelé, su época dorada, la creación de jugadas nuevas, todos los artífices y vistocidad del fútbol estaban en su máxima expresión. Argentina, México y Brasil eran los favoritos, y la fiebre de mundial nos invadía al 100%. Dejar de ver un juego de Brasil, era equivalente a perder un cheque de salario. Estas semanas, he visto ese mismo entusiasmo, fanatismo y arraigo. Es muy grato sentir de nuevo esa emoción, el sufrimiento con cada gol fallido, la rabia contra el árbitro por un error injustificado, las groserias propias contra el equipo contrario, y sobre todo la gritería con cada gol, y emoción, verdadera emoción y...